Reforma tributaria colombiana aprueba su primer debate.

Luego de 9 horas de discusiones y de que algunos partidos salieran del recinto del congreso por estar en contra de la reforma, esta aprobó su primera sesión y su discusión continuará dentro de algunas semanas.

El articulado, que fue radicado el martes en horas de la noche, se compone de 96 artículos, de los cuales 27 son puntos nuevos frente al proyecto original radicado el pasado 8 de agosto. En este nuevo proyecto las metas son más alcanzables y claras.

De la meta de 22 billones de pesos, 11,2 billones de pesos vendrán de los impuestos del uso del subsuelo (donde se incluyen los aportes de Ecopetrol), 3,3 billones de pesos de las personas naturales, 3 billones de pesos de las personas jurídicas, 2,9 billones de pesos de otras medidas, 1,2 billones de pesos de los impuestos saludables y 84.000 millones de pesos de tributos ambientales.

A pesar de la ponencia del partido Centro Democrático en contra de la reforma, aduciendo que el ejecutivo desea imponerla sin debate y que, además, en palabras de Miguel Uribe Turbay, senador del Centro Democrático: “ Esta es la reforma del desempleo, la pobreza y la inflación. La mejor tributaria es el crecimiento económico. Colombia no tiene una situación fiscal que amerite este proyecto”.

Por su parte, Óscar Darío Pérez, también del Centro Democrático, aseguró que esta reforma es un “freno de mano” para el crecimiento económico y que aumentaría el hambre a un millón de personas en Colombia pues se acaban los incentivos tributarios para las donaciones.

Después, los congresistas del partido Cambio Radical dijeron que se retiraban del debate de la reforma, entre otros, porque el proyecto genera inflación y destruye el aparato productivo de Colombia.

“Lo que Colombia necesita es una reforma que genere desarrollo, progreso, empleo y que proteja al empresariado. Es un proyecto inequitativo”, manifestaron los congresistas del partido.

A pesar de todas estas objeciones se aprobaron parte de los artículos y su debate continuará en las próximas semanas.

¿En qué cambio la reforma？

El nuevo proyecto de la reforma trae cambios de forma y fondo, incluyendo una meta de recaudo más aplomada. Algunos de los cambios principales que trae este proyecto incluyen modificaciones en relación con los impuestos como el patrimonio, los dividendos y las ganancias ocasionales, sobretasa de renta a varios sectores y la eliminación del impuesto a las exportaciones de carbón y petróleo, entre otros.

Por ejemplo, la mayor parte de ese recaudo la asumirá el sector minero-energético. A estas empresas se les pondrá una sobretasa de renta que equivale al 10 por ciento el primer año, al 7,5 por ciento el segundo y 5 por ciento en el tercero, y tampoco podrán deducir las regalías del impuesto de renta.

La propuesta es que el impuesto al patrimonio quede de la siguiente manera: a partir de 3.000 millones, con una tarifa marginal del 0,5 por ciento; a partir de 5.000 millones, de 1 por ciento, y desde los 10.000 millones de pesos, de 1,5 por ciento. Esa tarifa más alta no queda permanente.

La ponencia también contempla los impuestos saludables a las bebidas azucaradas y a los alimentos ultra procesados. La lista de estos últimos se ha modificado y por ejemplo algunos productos como el salchichón ya no quedarían gravados, pero se mantienen los productos de galletería, las confituras o los helados, entre otros. La tarifa sería gradual del 10 por ciento en el 2023, de 15 por ciento en el 2024 y de 20 por ciento en el 2025.

¿Como afectara esto la economía colombiana？

A pesar de los cambios en el proyecto y de haber disminuido las metas del recaudo de 58 a 22 billones, las medidas generarán un caos económico en Colombia.

Las medidas en contra del sector minero - energético atentan en contra de todo el país, las sobretasas generadas por el golpe tributario terminasen reflejadas en el ciudadano común, ya que el aumento en los combustibles y la energía impacta todos los sectores económicos.

El impuesto al patrimonio incentivará la huida de capitales del país en busca de mejores horizontes tributarios, lo que causará cierre de empresas, desempleo y decrecimiento económico.

Tal vez lo más impopular sería los impuestos a ciertos tipos de alimentos, aduciendo que son perjudiciales para la salud, pero en realidad lo que perjudicará la medida será la canasta básica de los colombianos.

Además de lo anterior, ciertas medidas y trinos en redes sociales del presidente colombiano como intervenir el banco central, lo único que causan son ansiedad económica y alejan el capital extranjero, el cual, acéptenlo o no, en nuestras economías emergentes son muy necesarios.

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