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Extracto:*La moneda mexicana tiene una apreciación ficticia que no ayuda en nada, al final estos fenómenos siempre se corrigen.
El peso mexicano se ha fortalecido a partir del pasado mes de julio, a pesar de que en los días recientes dio muestras de cierta debilidad nuevamente.
En el peor momento de la crisis desatada por la pandemia del Covid-19 la moneda del país azteca llegó a ubicarse en 25.3 pesos por dólar en el llamado mercado interbancario, hace apenas dos semanas llegó a 21.8 pesos, lo que supone una apreciación de 13.83 por ciento, equivalente a 3.7 pesos, nada mal para una moneda que parecía hundirse meses antes.
Sin embargo, esta recuperación es ficticia por dos razones: no se sustenta en una expectativa positiva de la economía mexicana, y de no ser por el apoyo del banco de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), el peso no solamente estaría más debilitado, sino incluso el banco central mexicano, Banco de México (Banxico), tendría hoy mucho menos reservas de las que tiene, muy cercanas al máximo histórico.
En el primer caso, es evidente que las expectativas en torno a la economía de México no son del todo favorables, de hecho, son muy desfavorables con una caída esperada para este 2020 de hasta 10.5 por ciento en su PIB, la segunda más fuerte de la región sólo por debajo de Venezuela en donde la actividad económica caerá hasta 12 por ciento.
El peso mexicano debería estar sumamente castigado, cerca de sus mínimos históricos frente al dólar, en 25.3 pesos por dólar, o incluso con nuevos mínimos; en el peor momento de la crisis reciente algunos análisis lo ubicaban entre 27 y 30 unidades por cada billete verde.
No es pesimismo contra el peso, es simplemente realismo; la divisa mexicana tiene que reflejar en algún momento la pésima situación de su economía, no hacerlo lleva a un escenario que ya ha vivido en otras épocas el país: una divisa relativamente sólida pero que no se sustenta en el crecimiento sino en factores de tipo monetario-financiero que en nada ayudan al desempeño del país. Pero, ¿cuáles son esos factores?
A lo largo de la historia reciente del país muchos factores han contribuido, pero en esta época, en los momentos actuales, un elemento que explica en gran medida lo que pasa con el peso tiene que ver con la Fed de Estados Unidos.
El banco central estadounidense puso a disposición del Banco de México y de otros 8 bancos centrales en el mundo, líneas de crédito swaps, por medio de las cuáles estas instituciones disponen de determinado monto de liquidez en dólares, para eventuales intervenciones en sus mercados cambiaros si las circunstancias lo requieren.
El monto de la línea, en el caso de México es de hasta 60 mil millones de dólares, de los cuáles el banco central mexicano ya dispuso de 17 mil millones. Esta inyección de recursos le ha permitido al peso disfrutar de un periodo de apreciación que como ya comentamos lo llevó de un nivel de 25 pesos por dólar a uno de 21.5 unidades.
Es una apreciación ficticia porque se sustenta en la inyección de recursos monetarios del exterior, provenientes de otro banco central; de no haber existido dicho mecanismo, hoy el Banco de México tendría 17 mil millones de dólares menos en sus arcas. El esquema swap permite el intercambio de una divisa por otra, pero al final en algún momento de los próximos años la Fed intentará recomprar sus dólares en el mercado mexicano, regresar los pesos que hoy tiene por el equivalente a esos 17 mil millones de dólares.
En otras palabras, se índuce una apreciación ficticia en la moneda mexicana, y tanto el peso como cualquier otra divisa qu se mueve en un régimen de tipo de cambio libre, tarde o temprano ajusta su valor en el mercado. Los recursos utilizados para estabilizar al peso no son originarios del propio país, forman sólo parte de una estrategia global para que los estragos de la pandemia no siguieran provocando riesgos mayores, pero los mercados siempre corrigen.
Si hoy yo pudiera tomar una posición en el mercado cambiario de México, sería sin duda predominantemente vendiendo pesos, es una moneda que mas adelante estará más barata, tiene todo en contra para ello.
¿Especulación? No es malo, finalmente de eso se tratan los mercados, especialmente el de divisas; la especulación no es el “monstruo” que se han hecho creer en muchos países, gracias a ella tenemos mercados financieros en todo el mundo, lo que sucede es que hay muchos tipos de especuladores, lo que tampoco es malo. Sin embargo, existimos también los que con base en análisis, cifras y datos, tomamos decisiones o ayudamos a que las tomen quienes deben hacerlo.
El peso mexicano corregirá su trayectoria, vienen meses muy complejos para la economía del país y de la región en la que se ubica, no puede mantenerse en una “burbuja”, sobre todo cuando la moneda es apuntalada por dinero del exterior.
Este artículo está redactado por el analista exclusivo de WikiFX, si quiere más artículos excritos por él y más informaciones referentes a los brokers globales de forex, descargue la App WikiFX, gracias!
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*Así como el mundo se ha vuelto adicto a la liquidez de los bancos centrales, también depende mucho de las tasas demasiado bajas
Aquellos años en los que existía el marco, la peseta, la lira, el florín, el franco… y tantas otras monedas
*La mayor economía de la región tiene problemas muy similares a los del resto del mundo, pero en un país tan grande estos se magnifican, además de que no nacieron con la pandemia
*Algunas tesis nos podrían dar pistas sobre lo que pasa, así como posibles soluciones para evitar colapsos posteriores o cuando menos diferirlos en el tiempo